En Raíces y Flores, ya sabéis que nos gusta mimar los momentos, cuidar la espontaneidad, apoyar la creatividad y desarrollar la autonomía de bebés/as y niños/as, así Daniela nos muestra como de una pared para que no pase una bola de madera, se puede integrar un muro, y posteriormente desarrollar un mural en 3D con todos materiales de juego y otros utensilios...
Respetar los ritmos vitales, el juego, las interacciones y promover la comunicación con las personas y el medio facilita que se produzcan transformaciones en el espacio que hacen sentirse parte imprescindible del mismo, autores de sus obras, corresponsables en su dinamismo y cambio, forjadores/as de ideas y proyectos.
Entre las actividades físicas y de control de nuestro equilibrio vamos incorporando prácticas como el acrosport, visionando documentales y experimentando con nuestros cuerpos.
En esta semana hemos disfrutado con la presencia de Leo y la incorporación de Martín, y a lo largo de estos días también lo harán otros niños y niñas, que a partir de septiembre formarán parte de nuestra comunidad educativa y social.
Los procesos de adaptación son momentos importantes para que familias, niños/as, padres y madres, se sientan en el entorno, se reconozcan en el proyecto pedagógico y encuentren cada uno su espacio de escucha, comunicación y encuentro interior.
Durante estos meses y de cara a septiembre nuestra comunidad socioeducativa se transforma, ya lo avisamos en nuestro documental, se acercaban momentos de cambio y crecimiento para el proyecto, y van llegando bebés/as y niños/as para unirse a Lua, Elhoy, Iris, Leo y Martín...